A pesar de que la Nueva Maravilla del Mundo estaba cerrada al público debido a restricciones sanitarias, los viajeros de todo el mundo aún lograron admirar el icónico equinoccio de primavera gracias a una transmisión streaming.
Cada año, el 21 de marzo y el 21 de septiembre miles de turistas visitan Chichén Itzá para ver el descenso de Kukulkán, cuando el sol brilla en un ángulo particular y crea la ilusión de una serpiente deslizándose por el templo.
La transmisión fue realizada por la página oficial de Facebook de Cultur Yucatán y llegó a más de 132.000 espectadores. La organización cerró el evento virtual con la esperanza de que las puertas de Chichén Itzá estén abiertas para el equinoccio de otoño.