Las autoridades de Perú están convencidas de que atraer a turistas una vez que finalice la pandemia generada por el coronavirus no será una tarea fácil, pero confían en que la magia que rodea una de las Nuevas 7 Maravillas del Mundo ayudará al propósito.
El trabajo en equipo que se está llevando a cabo desde el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), el Gobierno Regional del Cusco (GRC) y la Dirección Regional de Comercio Exterior y Turismo (Dircetur) para enfrentar el desafío, es un buen augurio en épocas de crisis como la que se está viviendo hoy en día.
El distrito de Machu Picchu depende casi enteramente del turismo, por lo que el plan de acción se centrará en atraer turistas nacionales y extranjeros con servicios a bajo costo en agencias de turismo, hoteles, restaurantes y servicios vinculados.